La silla voladora

Esta escena me recuerda a una situación en casa, en la cual me entonces pequeña hija de 4 años hizo el berrinche más grande de su vida.

Estaba enojada, frustrada, ni recuerdo por qué… pero lo que sí recuerdo es el pánico que sentí. Corrí a esconderme detrás del sofá, mientras ella aventaba las sillas del comedor y todo lo que estaba a su alcance.
Este día la niña de 4 años y su furia ganaron.

Me sentía derrotada, desesperada, incapaz y sin salida.

¿Cómo era posible que una niña tán pequeña tuviese tanta rabia y fuese capaz de levantar y aventar las sillas?

Mientras estaba escondida detrás del sofá, quebré en llanto, tomé mi teléfono y le hablé a mi coach para pedir ayuda.

Ese día fue un día crucial en mi vida como madre. Toqué fondo y sabía que no podiamos seguir así.

De los berrinches de mi hija, nacían los míos y parecía concurso para ver quién gritaba más fuerte.Esto tenía que parar.

Afortunadamente mi coach me ayudó a encontrar la razón y para mi gran sorpresa en ese momento, el problema no era la niña… era yo.Tantos años de frustraciones acumuladas, enojos no expresados, emociones guardadas me llevaban a explotar por cualquier cosa, gritaba, regañaba, mandaba sin pensar ni escuchar.y ese día, mi hija me hizo el gran favor de hacerme entender que ella también estaba harta.

Han pasado 11 años ya, con mucho crecimiento, consciencia y un mundo de herramientas adquiridas y puedo afirmar que desde entonces las sillas ya no vuelan, pero sirven para sentarnos a conversar, a convivir en familia y a conectar de corazón a corazón.

Desde el verano del 2016 tengo el honor de compartir muchas de estas herramientas que me ayudaron a cambiar la relación con mi hija y te invito a sumarte a este movimiento de paternidad consciente a través de las técnicas del Parent Talk System.

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Con respeto y gratitud
Séverine

Cuando no vemos ninguna salida

Sin Salida

La vida nos presenta con situaciones que a veces nos abruman tanto que no vemos ninguna salida.

Situaciones a través de las cuales nos enfrascamos en la postura de víctima. Perdemos la visión a largo plazo y al no ver salida, nos puede llevar a tomar acciones erroneas.

En estos momento “sin salida” es importante reflexionar si las acciones que estamos por tomar realmente nos traerán una salida o sólo nos hundirán más.

El Maestro Chick Moorman dice “Siempre tienes más soluciones de las que crees tener” y es aquí que quiero unirme y confirmarte que así es.

Cuando nos vemos arinconados, es cuando nuestra creatividad es forzada a buscar soluciones, es cuando nuestro ser es obligado a salirse de esta zona de confort (que ya ni tan confortable se siente). Es cuando nos vemos presionados por buscar una salida. Son momentos de alta tensión, de mucho estress, de sobrecarga de nuestro sistema nervioso y momentos que sentimos perder el control.

En estos ultimos meses he vivido situaciones personales y profesionales que me han llevado justo ahí al borde de mis nervios, a lo que pensé era el límite de mi paciencia, el fondo de mi “hoyo”.

Sin embargo, hoy entiendo que muy al contrario, me llevaron más allá de mis límites en el buen sentido de la palabra, me llevaron completamente FUERA DE MI ZONA DE CONFORT.

Estas situaciones me impulsaron a ser creativa, a reinventarme, a pedir ayuda y a buscar más allá de las soluciones que tenia a la mano, más allá de las respuestas que ya me sabía, más allá de las acciones obvias que me venían a la mente ya que no eran suficientes, no eran adecuadas, ya no.

Me sentí literal forzada a renacer, forzada a mirar hacia dentro para buscar las respuestas a mis preguntas.

ojo…

No son las preguntas “¿Por qué me pasa a mi? ¿Por qué me hacen esto?” 

Hablo de las preguntas “¿Qué me toca aprende de esta situación y qué puedo hacer para mejorar mis acciones?  ¿Qué puedo hacer para evitar cometer los mismos errores?

Mi resiliencia ha crecido, mis límites se han expandido, mi tolerancia a la frustración se ha fortalecido.

Hoy ya puedo ver luz, hoy ya encontré algunas respuestas, hoy entiendo que lo que más me costaba trabajo era pedir ayuda… y cuando me atreví y lo hice… esa ayuda llegó, sin juzgar, sin cuestionar, simplemente se manifestó.

Atrévete a enfrentar tus momentos más oscuros y atrévete a ver la luz que tienes dentro. TU tienes las respuestas, sólo tienes que hacerte las PREGUNTAS correctas.

Cuando sientes que no puedes más, busca apoyo, pide ayuda, acude con quien no te juzgará, con quien te ayudará a hacerte las preguntas adecuadas para encontrar las respuestas que necesitas antes de tomar acción.

Dato curioso – En Chino, la palabra “Crisis” significa “Oportunidad”

Toma cada “crisis” como una gran oportunidad para descubrir tus fortalezas, expandir tus horizontes y crecer como persona fuera de tu zona de confort.

Dicha

La vida me ha bendecido con encuentros especiales, con personas quienes han dejado huella y que han marcado mi camino, maestros que han sembrado conocimiento, me han llevado a abrir los ojos y estar mas consciente, guías hacia un despertar.

En este proceso de despertar, llegan momentos que se graban en cada fibra de tu ser. Momentos de intensa felicidad, momentos de DICHA que surgen en un instante y permanecen para siempre.

La felicidad radica dentro de ti, es cuestión de estimularla… de hacerte consciente de las bendiciones que te rodean, y dar gracias a la vida por cada uno de los momentos vividos… sean de alegría, de tristeza, de gozo o de dolor, todos y cada uno de ellos traen aprendizaje. Si logras ver el mensaje y el aprendizaje tras cada situación que vives, inicia un camino hermoso a un despertar y una plenitud.

Hoy afirmo que amo mi vida, y doy gracias a todos y cada uno de uds. que comparten este camino conmigo!!

Soy existencia, consciencia, DICHA.

Amo mi vida